Entrenadores cubanos consolidan el deporte en la UANL
Nuevo León.- Tres décadas han pasado desde que un contingente de entrenadores provenientes de la Isla llegó a la Universidad Autónoma de Nuevo León para impulsar, con base en innovadoras metodologías y disciplina, el deporte en la universidad y contribuir a su liderazgo a nivel nacional.
A mediados de la década de los noventa, el deporte de la UANL estaba a punto de recibir a entrenadores cubanos que mejorarían la preparación técnica y metodológica no solamente de los deportistas Tigres, sino de los estudiantes de la Facultad de Organización Deportiva (FOD) y de los entrenadores de las preparatorias y facultades de la Universidad.
Dicho convenio fue impulsado por el director de la Comisión Nacional del Deporte (CONADE) de esa época, Raúl González Rodríguez, quien firmó el acuerdo para que el deporte de Nuevo León se viera beneficiado con la llegada de dichos entrenadores, los cuales poseían una experiencia basta en la academia y en el campo de competencia.
José Alberto Pérez García, director de Deportes de la UANL, dijo que con este con ese convenio, las instituciones educativas se vieron beneficiadas en el área deportiva.
El directivo añade que se hizo una evaluación para determinar qué deportes estaban en crecimiento, cuáles podrían robustecerse o, como en el caso del waterpolo, iniciar su desarrollo.
Un contingente de primer nivel
Un momento clave para el deporte de la UANL fue la llegada del profesor Arístides Lanier Soto al posgrado de la Facultad de Organización Deportiva, trayendo consigo a los entrenadores Carlos Amador, de atletismo; Alejandro Laberdesque, en lanzamientos; Carlos Benítez, en polo acuático; Romarico Sánchez, en atletismo; Carlos Torres, en esgrima; Miguel Tachín, en lucha olímpica; Bárbaro López, en halterofilia, y Graciela Benítez, en gimnasia.
Junto con ellos también llegaron Maricruz Herrera en voleibol y Rita Monzón y Humberto Sánchez en natación. En la actualidad, la presencia cubana se mantiene con los entrenadores Jaime Jefferson, en atletismo, Abraham O Reilly Román, en esgrima, y los mismos Monzón, Laberdesque y Benítez.
La escuela cubana cumple treinta años de haber llegado a la UANL y haber dado realce al deporte universitario en todos sus niveles, ya que su conocimiento no solo fue recibido por los entrenadores de los representativos Tigres, sino que fue replicado por los entrenadores de preparatorias y facultades de la Universidad, que han logrado encumbrar a los atletas universitarios tanto en los torneos intrauniversitarios como a nivel estatal.