Maestro de la UANL inspira a que alumnos cumplan sus sueños
Nuevo León.- Inspirado en su sueño de convertirse en ingeniero, César Sordia Salinas logró titularse de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME), de la Universidad Autónoma de Nuevo León, dentro de la carrera de Ingeniero de Electrónica y Comunicaciones en 1983.
Previo a cumplir con este objetivo, el padecimiento de una retinitis pigmentosa fue ocasionando que perdiera la vista, lo cual no representó un obstáculo para él pues logró salir adelante con el apoyo de sus padres, José Sordia García y María Salinas de Sordia, y el acompañamiento de sus hermanos.
Actualmente, Sordia Salinas cuenta con una trayectoria de 40 años como profesor de FIME, vocación que comenzó a ejercer en febrero de 1985 impartiendo clases en el área de ciencias básicas, arropado siempre por la UANL, la facultad y sus mismos estudiantes.
Después de concluir sus estudios de ingeniería y realizar posteriormente una maestría en ciencias de la administración, con especialidad en investigaciones y operaciones, Sordia Salinas fue invitado a dar clases por el ingeniero Guadalupe Evaristo Cedillo Garza, ex director de FIME y Profesor Emérito de la Universidad.
Motiva a jóvenes a alcanzar sus metas
En el marco del Día del Maestro, que se celebra este 15 de mayo, Sordia Salinas comparte que, al ser profesor en los primeros semestres, el principal mensaje que busca dejar en sus alumnos es que todos tienen la capacidad para hacer realidad sus metas.
Aunado a su labor como maestro de tiempo completo, el catedrático de la UANL también es coordinador de Capacidad Académica, área que se encarga de las acreditaciones de los profesores y los cuerpos académicos ante el Programa para el Desarrollo Profesional Docente de la Secretaría de Educación Pública de México.
“Aquí me siento cobijado”
Rodeado siempre por alumnos que lo apoyan en el desarrollo de sus clases, Sordia Salinas asegura que una de sus mayores satisfacciones es el cariño que recibe por parte de sus estudiantes, a los que llama “hijos”, y poder ser testigo de sus triunfos personales y profesionales.
El docente universitario agradeció el apoyo de la UANL y la facultad durante todas las administraciones en las que ha estado al servicio de la institución.
“Estoy muy agradecido con la Universidad Autónomo de Nuevo León, con las autoridades, con los exrectores, con el programa de inclusión que tiene tanto la Universidad como cada una de las dependencias. Aquí me siento cobijado”.