Japón en primavera 冬; la efímera flor de los cerezos y el hanami
Para muchos la primavera es la mejor época para visitar Japón. Hablar de primavera en Japón es hablar de la floración de los cerezos o sakura, una época de belleza efímera y espectacular llena de nostalgia.
La primavera en Japón es una experiencia que recomendamos disfrutar al menos una vez en la vida.
De finales de febrero a principios de mayo, los cerezos florecen por todo Japón, de sur a norte acorde a los distintos climas existentes en las diversas regiones, y dependiendo de la variación del clima en cada temporada o año.
Los primeros cerezos del año florecen en las islas de Okinawa a fines de febrero o a principios de marzo (la región más meridional) y los últimos en la isla de Hokkaidō aproximadamente la última semana de abril o principios de mayo (la región más septentrional).
Ésta es la temporada habitual, pero se debe tener presente que la floración puede comenzar incluso en el mes de enero en el sur.
El hanami 花見
Hanami, es la tradición japonesa de observar la belleza de las flores, pero por lo general se asocia esta palabra al período en que florecen los cerezos y en el que los japoneses acuden en masa a parques y jardines a contemplar sus flores (sakura).
La contemplación de los cerezos en flor (hanami en japonés) es un elemento de la cultura nipona que fascina a un gran número de personas de todo el mundo. Esta fascinación es tal que muchos turistas de otros países deciden viajar a Japón en primavera para disfrutar de la floración.
¿Por qué y cómo empezó esta tradición tan particular?
La importancia de los sakura se remonta a siglos atrás, cuando la floración de estos árboles marcaba el inicio de la primavera y, por lo tanto, avisaba del momento idóneo para plantar el arroz, alimento crucial para los primeros habitantes de este país.
Durante este período, los cerezos eran vistos como seres sagrados y se creía que las almas de los dioses de la montaña anidaban dentro de ellos.
Por ello, los agricultores veneraban a estos árboles y creían que, cuando las flores rosadas del sakura estaban en su máxima floración, era cuando los dioses bajaban a las villas y se convertían en arrozales para ayudar a la producción del arroz. La historia del hanami nació, por lo tanto, de una tradición religiosa.
Sin embargo, no sería hasta el Período Nara (710-784) cuando esta costumbre comenzó a transformarse en la festividad sin connotaciones religiosas que es en la actualidad.
Aunque a muchos japoneses les costaría admitirlo hoy en día, se cree que la tradición proviene de China , concretamente de la costumbre de la dinastía Tang de contemplar las flores del ciruelo.
Por ello, en un principio el hanami era particularmente famoso entre las clases más altas de la sociedad, al relacionarse con los emperadores.
Lo que los japoneses particularmente adoraban de ella era su belleza y lo tremendamente efímero de su existencia (tan solo un par de semanas al año) . Así, esta flor rosada de pétalos delicados se iba abriendo camino entre todas las clases sociales como símbolo único de Japón.
La leyenda incluso dice que las flores del sakura eran blancas al principio, pero se tiñeron de rosa al mezclarse con la sangre de todos los samurais que cometieron seppuku al lado de estos árboles, como un intento de ver la belleza una última vez antes de morir.
En la actualidad, cada nueva temporada de floración, miles de japoneses se reúnen bajo los cerezos, en parques, jardines o montañas y disfrutan de un pícnic rodeados de sakura, mientras una lluvia de flores delicadas va tiñéndolo todo de color rosa.
Ahora, con la posibilidad de llevar comida y alcohol a estas celebraciones, el hanami se ha convertido en una auténtica fiesta que puede durar hasta entrada la noche (cuando el sol se va, la contemplación de los cerezos en flor pasa a llamarse yozakura , una combinación del kanji de sakura y del de noche).
Algunos dicen que el hanami está perdiendo su antigua esencia de contemplación y respeto de las flores debido a ese aire más festivo que lo rodea en la actualidad, sin embargo, no hay duda de que disfrutar de esta costumbre japonesa sigue siendo una experiencia única y espectacular que todos deberían vivir una vez en la vida.
LeAmericano utilizó recursos de Traveler / CondeNast / Agencia Xinhua / Gong Xiuxi / Alamy para la realización de esta nota.